Finito - Kaputt

Ale, ya está, al tercer día de vacaciones he terminado la última de las novelas del Potter ese.
No voy a desvelar nada, tranquilos. Bueno, nada a parte de que soy exageradamente lento, y cómodo (mejor acostado que sentado), leyendo. Lo curioso es que en el preciso momento en que lo he terminado, una tenue y breve lluvia ha empezado a caer. Liberador.

Aunque no sea nada, terminar un libro siempre da una satisfacción especial. Mayor aún la satisfacción si lo que terminamos es una saga. Quizás sea por eso por lo que me siento aliviado, como si hubiera cumplido con una de esas "tareas vitales" que tanto nos gusta a los humanos colgar de nuestro cuello.
Tal vez no cambie nada, pero hoy, con todo el tiempo por delante, me siento capaz de acometer lo que en años no he osado tocar.

Cuando el libro, Harry Potter, llegue a España, habrá llanto y crujir de dientes, creo.